Pensando en continuar la saga de héroes de la infancia que empecé hace tiempo, os traigo un dibujillo más. En esta ocasión se trata de los Power Rangers, pero no de los modernos (sí, los siguen emitiendo), que tienen lanchas, motos, chalets en Andorra… no no, me refiero a los Power Rangers clásicos: aquellos de Rita Repulsa y sus terribles dolores de cabeza, la cabeza flotando en formol que daba órdenes y demás.
Los chavales de mi generación teníamos la afición de vernos toda la clase de porquerías en la televisión para luego comentarlas en el colegio, y una de ellas era los Power Rangers; esto es así, nadie sabe por qué veia los Power Rangers, el caso es que lo veíamos y estábamos jodidamente enganchados. La serie desde luego no destacaba por su trama, ya que era muy estúpida… tampoco destacaba por los enemigos, ya que salvo algunas excepciones, tenían unos diseños bastante cutres… los protagonistas tampoco se salvaban, ya que no destacaban precisamente por su carisma… quizá lo único salvable eran las transformaciones del MegaZord, y se repetían en cada episodio, asi que tampoco era muy interesante de ver… y no hablemos de los efectos especiales, porque vaya tela, con esas chispas y esos ataques que fallaban pero aún así daban en el blanco; asi que no tengo ni idea de qué es lo que tenía esta serie, el caso es que a mí me tuvo viciadísimo todas las tardes de mi infancia, a la hora de la merienda.
Es por eso que esta serie entra con honores en la categoría de «héroes de la infancia», y le dedico el siguiente dibujo:
PD: Go-GO-POWER RANGEEERS!! ♪
Cada cue1l es libre de saber por que9 hace la cosas. Es algo privado. Como ane9cdota de este post dire9 que tengo una edatrna desde Google con las palabras «pornografeda con hadas», toma ya!
Y que siga siendo asi! 😀
Todos sin excepción somos una bizarrada personificada… y es eso lo que mola, y que nos da ese toque especial.